Cuando el desamor nos supera

Si estás pasando por la desagradable experiencia de amar a alguien que no te corresponde, bien porque tu relación de pareja se ha roto, o por tratarse de una relación imposible ya que la otra persona no está interesada en tí, te animo a que analices tu situación actual y observes si estás sintiendo el dolor lógico por la pérdida de ese ser querido o si más bien estás pasando por una experiencia dramática que está superando tus recursos emocionales.

Si tras estudiar la situación sientes que de algún modo te está sobrepasando, te invito a que consideres si alguna de las siguientes causas están aportando un sufrimiento añadido al dolor que razonablemente podemos sentir en esta circunstancia.

¿ Piensas que sentirte mal es algo que está mal ?

Sentirte mal en estas circunstancias es de lo más normal, nos ocurre al 100% de las personas cuando no somos correspondidas. No tienes porqué rechazar el dolor por la pérdida, ya que ésta es real, has perdido a alguien querido. Permítete aceptar el sufrimiento, llorar y desahogarte.

Puedes anotar la siguiente idea: TENGO que aprender a aceptar mis emociones, éstas no son ni malas ni buenas, simplemente son emociones.

Aprovecha esta situación para conocerte mejor, escribe sobre lo que sientes, dibuja, pinta, como mejor te expreses, pero hazlo sólo para tí, para tu propia información. Esta experiencia puede ser un camino hacia el autoconocimiento.

¿ Piensas que si la persona a la que amas no te corresponde es por que no tienes la suficiente valía como para que alguien te quiera ?

No importa si te han dejado o si ni siquiera has tenido la oportunidad de comenzar la relación. Eres lo que eres y vales lo que vales independientemente de lo que los demás piensen de tí, incluída esa persona por la que estás sufriendo.

Puedes seguir anotando: TENGO que aprender a valorarme y quererme.

¿ Piensas que nunca vas a encontrar a una persona que te ame ?

No es más que otra percepción falsa que no te lleva a ningún sitio. Pregúntate porqué te permites creer todas esas frases negativas que tu mente te está enviando: «¿Porqué pienso que nunca voy a encontrar a una persona que me ame?». No te fíes de todo lo que te dice tu mente, pues no siempre es reflejo de la realidad.

Sigue anotando: TENGO que aprender a no creerme todo lo que mi mente me dice.

¿ Piensas que no tienes suficientes recursos sociales para conocer a gente nueva ?

Supongamos que es así, no se te dan bien las relaciones sociales. Piensa un segundo y contesta a lo siguiente: ¿qué quieres hacer con eso? ¿cambiarlo o seguir como siempre? Puedes darte la oportunidad de aprender a entablar relaciones con nuevas personas, puedes vencer tus limitaciones analizando qué está impidiendo que te muevas en esa dirección. Observa tus propios miedos con curiosidad, con ganas de aprender y con paciencia.

Sigue anotando: TENGO que aprender a relacionarme con los demás.

¿ Entiendes todo lo anterior pero no te encuentras con la energía suficiente para ponerte en marcha y trabajar hacia el cambio ?

Bueno, se paciente y no fuerces tus límites, tómate tu tiempo, pero piensa que debes comenzar a tomar algunas decisiones: ¿qué vas a hacer a partir de ahora? ¿qué quieres hacer con todo lo que has observado ?

Si tienes claro que deseas cambiar aquello que te está haciendo sufrir más de la cuenta, toma conciencia de esa determinación, pon toda tu intención en ello y decídete a cambiar todos los «TENGO QUE…» por «QUIERO…».

Comprometerte con el cambio, tomar decisiones y comenzar a moverte en dirección a tus objetivos es un buen comienzo para lograr tus propósitos, que en este caso no es otro que mejorar tu bienestar emocional.